domingo, 18 de julio de 2010

Todo acto se hace para alcanzar un fin

"Cuando el guerrero extiende su arco pone la mirada fija en la diana"
-Aristóteles

Cada movimiento en nuestra vida lo hacemos con una intención, consciente o inconsciente. Podemos distinguir fines buenos y malos, así como acciones buenas y malas. Lamentablemente, para que una acción sea buena no basta con que su objeto sea bueno, sino que el fin tiene que ser bueno también.

a) El fin bueno puede hacer que la acción buena sea mejor.
b) El fin malo hace mala una acción que podía ser buena.
c) El fin malo aumenta la malicia de una acción mala.
d) El fin bueno nunca convierte en buena una acción mala.

Conclusión: No basta tener una buena intención para actuar rectamente.

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