miércoles, 26 de junio de 2013

¿Será solo un charco?

Preferí sentir a ignorar el latir que se hace notar cada vez que te aproximas. Decidí darme la oportunidad de pensar en ti cuando mi mente libre es de llenarse con otras ideas.

Como antes había pasado, no sé nada del qué decir, del qué hacer, del qué creer para vivir, solo vivo.  Y cada día que pasa me descubro, te descubro y me descubro en ti.

Mas cuando me convenzo de que puedo llegar a una parte más profunda de ti, me quedo en la orilla, en el charco de las fútiles conversaciones cotidianas. Y reflexiono... ¿será que es solo eso? Un charco nada profundo, un pozo sin agua. Y es que los charcos no tienen sentido de ser, no son fuentes de vida, son efímeros y se secan con el primer rayo de sol.

Estos días

Existen días que son más que días,
en que la vida se descubre desnuda
sin manto ni velo que la cubra,
en su forma más simple y pura.

Existen días hechos a la medida,
que se ciñen firmemente a tu cintura...
hoy es uno de esos días.

martes, 25 de junio de 2013

Mientras tanto te pienso


De entre tantas cosas que pienso, te pienso. Te dedico este tiempo, mi tiempo, del que dispongo para pensar mientras te pienso. Y mi pensamiento se vuelve tuyo, invasión premeditada. En cada mañana que arriba perseguida por el sol te materializas.

Mis palabras retraigo y mantengo silente, porque entre tantos minutos compartidos desconozco si me piensas. Sin embargo, dejo abierta la puerta, por si mañana te das cuenta que como yo nadie te piensa. Y es allí en tu pensamiento, donde tú y yo habremos de encontrarnos finalmente. Amor a primer pensamiento.

Y pienso en tu abrazo tímido, ligero, tu mirada indagante. Tú, a quien nada digo, mas calladamente pienso. Tú, quien pienso, día tras día, sin atrevimiento suficiente para confesarte que te pienso... y siento, sí, sobre todo, siento.

¿Será, acaso, que tú también me piensas?