Si tuviera diabetes moriría antes de lo esperado. Seguramente no sería la enfermedad la causa de mi muerte, sino mi adicción por los dulces. No sé qué haré con mi GRAN apetito por los dulces. Me parece que esto lo llevo en mis genes, porque mi madre es igualita.
Soy de las que amarían tener la fábrica de Willy Wonka en la esquina y a Charlie como amigo cercano. Si alguna vez me quieren agradar, con un buen dulcito no estaría mal, especialmente si se trata de chocolates Hershey's.
No hay comentarios:
Publicar un comentario